Es completamente normal preocuparse cuando las cosas no salen bien, pero si estas preocupaciones nos van consumiendo física y mentalmente, puede hasta que dirijan tu vida, cayendo en un ataque de ansiedad, o en depresión.
La ansiedad es una acción humana que afecta la mente y el cuerpo, haciendo una reacción básica de estar alerta cuando alguien percibe peligro o amenaza.
El sentido de huir o salir corriendo de la situación o lucha ocurre cuando una persona se siente en amenazada por algo desconocido, pocos minutos después el cerebro, se encarga de pensar las cosas más coherentes, analiza la situación, evalúa la amenaza si la situación es real. Cuando el cuerpo y la mente reaccionan al peligro en al algunos casos no en todos, dan sensaciones físicas de la ansiedad como: la aceleración del ritmo cardiaco, tensión muscular, palmas de manos sudadas, malestar de estomago y temblor en el cuerpo.
Ansiedad generalizada:
Es un trastorno común, hace que las personas se preocupan con mayor intensidad, sobre muchas cosas, tratándolas de resolver al mismo tiempo, pueden entrar temas familiares, académicos, laborales, etc. Y la sintomatología de esta ansiedad generalizada es muy diferente a la ansiedad normal, podemos decir que esto puede ser peor, los síntomas físicos son: dolor en el pecho, dolor de estomago y vómitos. La ansiedad generalizada puede afectar a que la persona falte a sus eventos sociales o académicos, las preocupaciones se vuelven una carga, haciendo su vida muy agobiante y con una carga emocional muy fuerte.
¿Qué hacer con la ansiedad y depresión?
Tratar el problema o aceptar que tienes depresión o ansiedad es una gran ventaja para salir de esa mala racha, el primero consejo que te podemos dar es:
*Hablar con tus padres, tutores o un amigo cercano para desahogarte
*Trabaja con un profesional de la salud
*Haz ejercicio come bien y duerme bien