En entornos cálidos y en regiones templadas es donde podemos encontrar a estos insectos de la familia de los lampíridos.
Existen más de 2,000 especies de luciérnagas, conocidas por su brillo característico que es por lo general intermitente, y que les ayuda a encontrar posibles parejas o como un mecanismo de defensa.
Los científicos no saben exactamente cómo es que regulan el proceso de encender y apagar su luz, pero lo que si se sabe es que la producen porque tienen órganos lumínicos especiales debajo de su abdomen.
Sin apenas generar calor, la reacción se produce cuando absorben oxígeno que se combina con una sustancia llamada luciferina.
De acuerdo con experimentos del científico Bruce Branchini de Connecticut College, el oxígeno que interviene tiene una forma especial llamada anión superóxido, una forma de oxígeno molecular que contiene un electrón adicional.
Otras personas como el biólogo químico de la Escuela de Medicina de la Universidad de Massachusetts Stephen Miller considera importante seguir estudiando la luciferina y la bioluminiscencia pues tendría aplicaciones potenciales en medicina.
Esto porque, según estudios, ya está demostrada su utilidad como herramienta en escaneos de tumores humanos y en el desarrollo de fármacos anticancerosos.
Es sorprendente como estos pequeños escarabajos que suelen medir entre 5 y 25 milímetros de longitud logran crear un gran espectáculo nocturno, pero también lo es el hecho de que están en peligro de extinción.
La pérdida de sus hábitats naturales, el uso de pesticidas y la luz artificial están poniendo en riesgo a la disminución de las luciérnagas.
Para contribuir a su preservación, existen santuarios como el ubicado en los bosques de Nanacamilpa, Tlaxcala donde el aprovechamiento de madera era la principal actividad productiva de la región hasta el 2011.
Los habitantes de la zona notaron que muchas personas visitaban el lugar para observar a las luciérnagas, además de que se percataron de que notaron que los bosques disminuían, así que decidieron conservarlos y fomentar el turismo.
Aun así es importante reconocer que si el ecoturismo no es bien llevado, lejos de contribuir de manera positiva podría resultar en una grave amenaza, así que te recomendamos no tirar basura, escuchar el reglamento y las instrucciones de los guías, seguir el camino por los senderos establecidos y no utilizar ninguna luz externa como celulares o flashes de cámaras.