Lo que solía ser una majestuosa casona del siglo XVII, en pleno corazón de Oaxaca, cobró vida como un hotel boutique que conjuga la arquitectura colonial, arte y diseño contemporáneo para ofrecerte un espacio que respira paz. Se trata del nuevo Hotel Sin Nombre.
Al cruzar sus puertas atestiguarás cómo la inspiración minimalista, el estilo de construcción autóctona y la sofisticación de lo artesanal, son la esencia de esta nueva propuesta en uno de los sectores más concurridos del Centro Histórico de Oaxaca, a tan solo unos metros del zócalo, la catedral y la alameda de León. Si te adentras un poco más, encontrarás su patio central donde dominan los tonos blancos que se iluminan naturalmente y accesorios hechos a mano como sus cojines y tapetes.
Tras una cuidadosa restauración a cargo del arquitecto João Boto Caeiro, se logró una atmósfera vanguardista repleta de tradición, diseño y sustentabilidad, con sutiles matices árabes. Se conservaron elementos arquitectónicos originales de la casona, como su escalinata central, los techos abovedados y los muros.
En cuanto a sus 22 habitaciones, descubrirás mobiliario en maderas tropicales de aserraderos certificados y piezas antiguas. Cada espacio permite descubrir detalles únicos, como el domo de vidrio y herrería de principios del siglo XX; la Bibliotequita y la terraza con piscina, desde donde disfrutarás panorámicas que van hasta Monte Albán y San Felipe.
Además, en el hotel se expone la obra de artistas locales, como el fotógrafo Alberto “El Negrito” Ibáñez y el artista visual juchiteco Sabino Guisu. Conocerás también su increíble Restaurante Sin Nombre, propuesta culinaria del Chef Israel Loyola que fusiona la tradición gastronómica de diversas comunidades de la región con recetas veganas preparadas con ingredientes de temporada y de cultivo orgánico.