Al pasar por las calles empedradas y túneles de la ciudad de Guanajuato, se observan múltiples construcciones, las más antiguas datan de la época de la conquista y muchas recuerdan la actividad minera de la zona. Destaca la Alhóndiga de Granaditas, uno de los primeros escenarios de la Independencia.
Para conocer a fondo los lugares más icónicos de la ciudad, se necesita por lo menos de una semana. Hay mucho que visitar: la Presa de la Olla, el monumento al Pípila, el Callejón del Beso, el Museo de las Momias de Guanajuato y la tienda de dulces tradicionales.
Por las tardes, el ánimo de fiesta comienza con la callejoneada, en donde estudiantes y artistas cantan tradicionales canciones mexicanas, mientras recorren las calles y cuentan historias. Puedes pasar la noche en el hotel Castillo Santa Cecilia, un increíble lugar que data del año 1686.
Vale la pena recorrer la ciudad caminando por la mañana. Puedes subir al monumento al Pípila, en el funicular color rojo; desde ahí tienes una vista perfecta de toda la ciudad y puedes capturar la foto perfecta para tus redes sociales.
Al bajar del mirador, debes visitar el Teatro Juárez, el cual se caracteriza por sus majestuosas columnas en la entrada, en contraesquina con el restaurante Casa Valadez, excelente lugar para comer y terminar el día con una propuesta gourmet.
LOS MEJORES ACOMPAÑANTES
PROTEGE TU PIEL. Para disfrutar al máximo de la belleza de Guanajuato, tendrás que exponerte al sol por un tiempo considerable. No olvides bloqueador solar, de preferencia de alto grado de protección, como el Abeille Royale.
DISFRUTA EL PASEO. Prepara unos zapatos cómodos, con los que puedas subir y bajar sin lastimar tus pies. Te recomendamos calzado New Balance para senderismo.
NO PIERDAS EL ESTILO. Un sombrero te vendrá bien, tanto como para cubrir tu cabeza y proteger tus ojos, como para mantenerte a la moda. Combina tu outfit con una pieza de Medfield Seagrass.