México continuará bajo su régimen de trabajo actual durante el resto del año, ya que legisladores y empresarios han rechazado la propuesta de reducción del horario laboral en la iniciativa de Reforma a la Jornada Laboral 2023, pero ¿qué fue lo que pasó?
Este tema ha sido objeto de polémicos debates en los últimos meses, lo que llevó a los legisladores a unirse a los empresarios en el primer parlamento abierto, por lo que ha generado mucho interés en millones de personas; tanto empresarios como de trabajadores.
¿La reforma laboral de reducción de horas se aprobó?
Se discutió que la Reforma a la Jornada Laboral 2023, que promete reducir las horas de trabajo en todo México, no ha sido aprobada, por lo que la resistencia empresarial parece haber inclinado la balanza a su favor.
Entre los argumentos presentados por los defensores de la Reforma a la Jornada Laboral 2023, destacan los beneficios para la salud física y mental de los trabajadores, así como mejoras en sus relaciones laborales y vida personal.
¿Por qué rechazó la reducción de horas laborales?
El Palacio Legislativo de San Lázaro fue lugar en donde se llevó a cabo el primer Parlamento Abierto, con representantes de organizaciones civiles de empresarios, diputados y senadores.
Aquí se debatieron las razones para aprobar o rechazar la Reforma a la Jornada Laboral 2023, que busca reducir la semana laboral de 48 a 40 horas.
Fue Ricardo Barbosa Ascencio, el presidente nacional de la Comisión Laboral de Coparmex, quien expresó que, en las condiciones económicas actuales de México, no es el momento adecuado para aprobar esta reforma.
Argumentó que es una medida populista y que los empresarios no están en contra de la reducción del horario, ya que ellos impulsaron la iniciativa de "vacaciones dignas" a principios de año.
Los empresarios señalan preocupaciones clave, como el aumento de los costos de producción, las horas extra y la gradualidad en la implementación del nuevo horario de 40 horas semanales.
Este primer Parlamento Abierto ha generado opiniones encontradas, con algunos legisladores argumentando que la jornada laboral actual es demasiado para este momento y que no debería de pasar.
Algunos legisladores, como Susana Prieto de Morena, defienden la reforma como un acto de justicia social, afirmando que se debe a los trabajadores de México.
Además, argumentan que, a pesar de los posibles aumentos en los costos para los empresarios, la justicia social podría resultar en una mayor productividad.
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