Este hermoso Estado con más de 540 mil turistas al año, reúne siete ecosistemas que te llevarán a través de selvas, bosques, ríos, cascadas, zonas arqueológicas y más, además de ser el segundo lugar en México en cuanto a diversidad étnica. Sobre su gastronomía, no hay punto de comparación, acabarás por amar cada uno de sus típicos platillos. La esencia chiapaneca se traduce a través de su gente, lenguas, colores, sabores y tradiciones. Y qué mejor que celebrar tu boda con esta tendencia íntima y colonial, y los increíbles escenarios de fondo que solo Chiapas ofrece. Descubre nuestros lugares favoritos para disfrutarla al máximo.
Bosques del Sol
Este hermoso hotel boutique se encuentra en San Cristóbal de las Casas. Dispone de seis habitaciones para 24 personas en total, perfecto para hospedar a los novios y a sus familias. Además, tendrás el servicio de su exquisito restaurante La Luciérnaga, rodeado de detalles como árboles de manzanilla con más de 100 años y un concepto de enfoque ecológico donde no se permite el uso de plásticos.
Plaza Real
Se trata de un adorable restaurante sobre el Andador Principal de San Cristóbal de las Casas donde podrán crear la decoración de tus sueños. Además, cuentan con hotel aliado, Villas Casa Morada, que pueden incluirte en el paquete y está a solo 10 minutos del restaurante. Antes de llegar a la gran fiesta podrás hacer la callejoneada, una hermosa tradición que te encantará.
Parador Santa María
A 40 minutos de Comitán de Domínguez se encuentra esta majestuosa hacienda perfectamente conservada y con una vista hacia verdes paisajes. Aquí puedes hacer una boda muy especial con vistas de impacto y es ideal para hospedar únicamente a la familia pues tiene espacio para 16 personas.
La Ceiba
Este hotel en el Pueblo Mágico de Chiapa de Corzo tiene todo el estilo mexicano que buscas. Uno de sus grandes atractivos es la vegetación selvática con miles de flores de la familia de las heliconias. Durante una boda de destino aquí, tus invitados podrán recorrer los alrededores para conocer tradiciones autóctonas como la más característica: Los Parachicos, que danzan cada enero, del 15 al 23, y son la razón por la que Chiapa de Corzo fue declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.