Con no sólo uno, sino 5 vestidos de novia, uno cada más impresionante que el siguiente, llenos de encaje, seda y tul, es más que claro que Lady Kitty Spencer, la sobrina de Lady Di, tuvo una boda digna de una princesa. Y es que la modelo no sólo se casó con un multimillonario, sino que también nos ha demostrado que tiene mucho estilo a la hora de anunciar momentos especiales.
Kitty Spencer, de 30 años, se casó con el millonario minorista Michael Lewis, de 62 años, en un castillo italiano del siglo XVII el sábado, y ahora que se han dado a conocer las fotos, el evento salió de los mismos cuentos de hadas que ni siquiera su difunta tía habría podido imaginar.
La novia, hija del Conde Spencer, el hermano de Lady Di, deslumbró con una serie de vestidos hechos para la ocasión por la casa de moda Dolce & Gabbana, de quien es embajadora de la marca. El dúo italiano también vistió a muchos de su brillante lista de invitados.
El vestido principal de Kitty, con un intrincado diseño de encaje floral, cuello alto, mangas largas y hombros abullonados, era un eco del vestido de novia de su propia madre.
Sin embargo, no usó la distintiva tiara de diamantes de Spencer que lució su madre en la ceremonia de 1989, y la más famosa por su tía Diana cuando se casó con el Príncipe Carlos en 1981.
Tampoco hubo señal en las festividades, que se prolongaron durante varios días, de su padre. El viernes había publicado una foto de una luna sobre el hogar ancestral de la familia, Althorp en Northamptonshire. Pero no creemos que haya sido distanciamiento entre familia, sino que las restricciones de viaje actuales seguramente impidieron que todos pudieran reunirse para la ocasión.
No es que la familia estuviera ausente del evento, pues Kitty fue escoltada en la ceremonia, celebrada en los jardines de Villa Aldobrandini, una impresionante mansión en Frascati, cerca de Roma, por su hermano Louis Spencer, vizconde Althorp, y su medio hermano Samuel Aitken, cuyo padre es el empresario, Jonathan Aitken.
También se sabe que asistieron sus hermanas Eliza y Amelia Spencer, la menor de los 4 hijos del Conde Spencer y Victoria, su esposa. Otros invitados incluyeron a sus compañeras modelos de Dolce & Gabbana, Emma Weymouth, la marquesa de Bath y la esposa de Idris Elba, Sabrina. La cantante pop Pixie Lott, amiga desde hace 5 años, también estuvo presente.
No hubo señales de los primos de Kitty, los Príncipes William o Harry, a cuyas bodas ella asistió en 2011 y 2018 respectivamente.
Después de la ceremonia, la pareja invitó a los invitados a una lujosa cena y baile, antes de subir al balcón para ver un increíble espectáculo de fuegos artificiales.
Lady Kitty y su esposo, que es 5 años mayor que su padre, se habían estado preparando para casarse desde antes de la pandemia, después de que él le propusiera matrimonio con un anillo de diamantes de 300 mil libras justo antes de Navidad de 2019.
Habían estado saliendo discretamente desde 2018, y ella supuestamente ha recibido orientación sobre su fe judía.
La división de Alta Moda de Dolce & Gabbana pasó alrededor de 6 meses creando su vestido de novia en su fábrica de bordados y taller de Milán.
Los diseñadores dijeron que solo tuvieron 4 pruebas para llegar a la meta. "Han sido momentos hermosos y emocionales", dijo Dolce. “Una de las inspiraciones es definitivamente su amor por Italia. Kitty está enamorada de nuestro hermoso país y de su rica historia, arte y cultura”.
Stefano Gabbana dijo: “Pero también es una niña muy apegada a sus orígenes, a Inglaterra; a su herencia de la gran época victoriana. Y como todos los ingleses, tiene una gran pasión por todo tipo de flores".
La noche anterior a la boda, como parte de su vestimenta pre nupcial, Kitty lució un vestido de tul azul celeste y una capa bordada con flores de punto de cruz que también le hizo Dolce & Gabbana.
Después de la ceremonia principal, se puso un vestido de seda doble pintado a mano adornado con flores y cristales para la cena de bodas.
Luego se cambió por tercera vez en su gran día, cambiándose por un vestido de cóctel bordado con cuentas plateadas y doradas. Y finalmente se le vio con un vestido de mikado, adornado con lentejuelas y flores.
Kitty se alejó de la mirada pública en Sudáfrica, pero ahora es una de las mujeres más populares de Londres. Su carrera como modelo se lanzó a través de una sensacional portada de Tatler en 2009, en la que parecía una Brigitte Bardot de sangre azul.
Profesionalmente, está representada por Paula Karaiskos, quien también contrató a Kate Moss en la agencia de modelos Storm.
Después de tener romances con el magnate de la propiedad Niccolo Barattieri di San Pietro y el nieto del jugador de críquet Denis Compton, Nick, conoció a Lewis a través de su antiguo jefe, el exsecretario de defensa Liam Fox, para quien Kitty trabajaba en la organización benéfica militar 'Give Us Time'.
¿Cuál fue tu vestido favorito?