Para Adriana, el emprendimiento significa algo muy importante en su vida, ya que eso le ha dado mucho aprendizaje profesional en su día a día y que ha logrado llevar con éxito su marca Adriana Soto. “Tenía muchas inquietud por empezar mi propio negocio. Hicimos un viaje familiar a Miami y me gasté 400 dólares en un par de zapatos Dolce&Gabanna, fue mi primera compra de impulso. En esas épocas, yo veía cómo muchas amigas iban a Estados Unidos y se compraban muchos pares de zapatos, entonces decidí emprender mi primer negocio y hacer mi propia marca de zapatos para mujer”, recordó.
Pero algo que sin duda la ayudó a impulsar su negocio es el amor por lo que hace diariamente y con lo cual está sumamente agradecida debido a que su marca tiene ya un lugar dentro de la industria de los zapatos en nuestro país y eso lo sabe muy bien porque tiene bastante claros sus objetivos para lograr que el trabajo que realizan ella y todo su equipo sea una motivación para más emprendedores. “El amor por el oficio zapatero fue lo que me impulsó, me enamoré de los procesos, de la piel, de las máquinas, de los zapateros, todo me pareció fascinante y muy complejo a la vez. Soy una mujer de retos, entonces sabía que era el camino correcto. México es un país hermoso con una industria zapatera increíble y creo que los mexicanos podemos quedarnos con mucha materia prima de lujo que se exporta a otros países. Nuestra marca va dirigida a hombres y mujeres que aman hacerse todo a la medida”, mencionó.
Y es que el hacer zapatos a la medida para sus clientes es todo un arte para Adriana y su equipo de trabajo, quienes lo único que buscan es satisfacer las necesidades de sus compradores para que se vean y se sientan bien gracias a sus diseños.
“El arte de hacer zapatos artesanales es un proceso fascinante en donde cada par es la extensión de cada cliente. Son pares únicos y personalizados que se fabrican a fuego lento. La experiencia de todo el proceso consiste en tres citas; en la primera tomamos medidas; en la segunda hacemos ajustes; y en la tercera se entregan los zapatos finales”, destacó.
Sin duda, el diseño y los zapatos representan una parte importante de la vida de Adriana, quien ha sabido destacar en esta industria y, sobre todo, conocer más los gustos y necesidades de los mexicanos a través de todo el proceso que implica su marca. Además, el lujo se ve plasmado en cada una de sus piezas, ya que el trabajo a detalle, así como los materiales con los que realizan los zapatos son de primer nivel. “Nuestros zapatos realmente son piezas únicas, nadie más las tiene en el mundo; son cómodos y están hechos con mucho cuidado y cariño. Manejamos diferentes tipos de piel y depende lo que pida el cliente, Son pieles certificadas y de criadero. Nuestros clientes tienen que agendar su cita en la página de internet www.adrianasoto.com.mx, ahí hay un enlace, y nuestro showroom está ubicado en Polanco, en Ciudad de México. Creo que la fabricación tiene un tiempo y aquí respetamos el tiempo que toma cada proceso, no nos gusta hacer las cosas al aventón. Lo que más me gusta de estar frente a este negocio es que puedo expresar toda mi parte creativa; tengo tres hijos, pero el diseño es mi cuarto hijo”, concluyó
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LA MEJOR CALIDAD
Los cueros que la marca utiliza para la fabricación de sus zapatos son 100 porciento mexicanos, además, trabajan con diferentes proveedores para lograr los mejores acabados.
CONOCE MÁS SOBRE LA TRAYECTORIA DE ADRIANA SOTO
Adriana Soto se graduó en 2008 de Diseño Industrial en la Universidad Iberoamericana. Obtuvo un master en Fashion Marketing en el Instituto Marangoni de Milán y posteriormente en el colegio Ars. Suttoria de Nueva York tomó el master “The Art of Traditional Shoemaking”. Trabajó con El Palacio de Hierro durante ocho años, siendo proveedora de calzado para TOPSHOP, WILD & ALIVE, MINOLA Y NICK&EM. En 2013 presentó sus zapatos en New York Fashion Week con el diseñador Ángel Sánchez. Además, su carrera ha sido reconocida con algunos premios incluyendo Diseñadora de Calzado 2012, por Fashion Group International Mexico; fue invitada a ser analista de moda para los premios Oscar 2013 y en 2012 comenzó a hacer zapatos a la medida para hombres y mujeres con la marca que lleva su nombre. Celebridades como Alejandra Guzmán, Belinda, Sebastián Rulli, Alessandra Rosaldo, Karla Souza, Ana Claudia Talancón, Altair Jarabo y Jimena Navarrete han usado sus zapatos.