Derribando mitos: Merz Aesthetics y el amor propio a través de la medicina estética

Estilo de vida

No muchos relacionarían el amor propio y la medicina estética, pero Merz Aesthetics lo ha hecho de la mejor forma

COMPARTE ESTA NOTA
Merz Aesthetics y el amor propio a través de la medicina estética (Foto: Freepik)

La relación entre el amor propio y la medicina estética es un tema que suscita opiniones variadas y, a menudo, contradictorias. A primera vista, podría parecer que someterse a procedimientos estéticos es una manifestación de superficialidad o una falta de aceptación personal.

Sin embargo, al profundizar en las motivaciones y las experiencias individuales, se revela una conexión más matizada y, en muchos casos, positiva entre el amor propio y la medicina estética. Merz Aesthetics, por ejemplo, ha hecho una campaña sobre esta relación, y te tenemos todos los detalles.

La relación entre el amor propio y la medicina estética

El amor propio se define como una aceptación y aprecio profundo hacia uno mismo. No se trata solo de sentirse bien en el plano físico, sino de cuidar de nuestra salud mental, emocional y física.

La medicina estética, por otro lado, comprende una serie de procedimientos destinados a mejorar la apariencia física, desde intervenciones mínimamente invasivas como la toxina botilínica y los rellenos dérmicos, hasta cirugías plásticas más complejas.

La clave para entender la relación entre ambos conceptos radica en las motivaciones y las expectativas de quienes optan por estos procedimientos. Y, como Merz Aesthetics nos ha dicho personalmente, en la forma en que uno quiere vivir, que es el resultado final.

Merz Aesthetics y el amor propio a través de la medicina estética (Foto: Cortesía)

Aunque todavía hay muchos mitos al respecto, para muchas personas, someterse a un tratamiento estético puede ser un acto de empoderamiento personal. Enfrentarse a una característica física que ha sido motivo de incomodidad o inseguridad y decidir hacer algo al respecto puede ser una forma poderosa de ejercicio de control sobre el propio cuerpo y, por ende, una expresión de amor propio.

"Incluso las personas que actualmente se involucran en la medicina estética pueden sufrir algunos de estos prejuicios", nos dijo Can Gumus, presidente de Merz Aeshetics Latam. "Creo que es realmente importante difundir un mensaje honesto sobre el hecho de que estos procedimientos son para ti y debes lucir bien y mereces sentirte bien".

Finalmente, muchos podrían recurrir a estos tratamientos para encontrar el amor propio, pero la medicina estética puede ser una forma de ejercer ese amor propio. "Ya eres hermosa, así que no se trata solo de hacerte bella, sino de hacerte sentir más feliz y vivir mejor", concluye Gumus.

Can Gumus, presidente de Merz Aeshetics Latam (Foto: Cortesía)

Es crucial examinar las motivaciones detrás de la decisión de someterse a procedimientos estéticos. Cuando esta decisión proviene de un deseo genuino de sentirse mejor consigo mismo y no de una presión externa, puede ser una manifestación válida de amor propio.

Vivimos en una sociedad donde la apariencia física es frecuentemente valorada y juzgada, y es fácil caer en la trampa de buscar procedimientos estéticos para cumplir con estos estándares impuestos por los medios y la cultura popular. Si las decisiones estéticas están impulsadas por la necesidad de aceptación externa o por comparaciones constantes con ideales de belleza poco realistas, pueden estar más relacionadas con la inseguridad que con el amor propio.

"El reto que tenemos nosotros como industria es que la gente le pierda el miedo a los tratamientos, creen que se deforman la cara o que les pueda pasar algo, pero en realidad son seguros en manos correctas, con productos correctos", nos comentó Juan Puyo, Gerente General de Merz Aesthetics México y DPB. "También hay un mito detrás de la industria, que es el de 'yo quiero envejecer con dignidad' y esto no te quita la dignidad, al contrario; es verse bien para sentirse bien, para vivir bien."
Juan Puyo, Gerente General de Merz Aesthetics (Foto: Cortesía)

El amor propio también implica aceptar nuestras imperfecciones. Buscar mejoras estéticas no debería ser un rechazo de uno mismo, sino más bien una forma de alinearse con cómo uno se siente mejor y más auténtico. En este sentido, la medicina estética puede ser vista como una parte de nuestra evolución personal y de cómo elegimos presentarnos al mundo.

Y, finalmente, Merz Aesthetics solo nos da la decisión de elegir una herramienta más: "Al paciente lo que queremos es educarlo para que pueda elegir. Entendemos que todavía hay muchos mitos alrededor de estos tratamientos, 'que te van a deformar, que van a envejecer más rápido, qué pasa cuando se va el producto y si se van a arrugar más'. Todos son mitos", dice Juan.

"Un buen tratamiento no es el que se nota, en realidad no se nota, son toques tan finitos y tan bien hechos que no se te nota, entonces no te cambia la expresión de la cara, a menos que eso busques, lo cual es completamente respetable. Te mejora una arruga o te quita una arruga, te cambia que si tienes los ojos un poquito cerrados de cansancio o de lo que sea, te los ayuda a levantar, pero la expresión tuya no te la debe cambiar", concluyó Puyo.

La campaña 'Nice to Meet Me' de Merz Aesthetics

La relación entre el amor propio y la medicina estética es profundamente personal y varía de una persona a otra. Sin embargo, el mensaje más honesto viene de personas reales con historias personales, lo cual inspiró la nueva campaña de Merz Aesthetics, "Nice to meet me".

Para difundir los mensajes de la campaña, fueron elegidas como embajadoras la actriz brasileña Sheron Menezzes, la modelo y presentadora argentina Zaira Nara, la modelo y presentadora colombiana Laura Tobón, la presentadora y actriz mexicana Mariana Echeverria y la influencer fitness Karina Campos, de Costa Rica.

"En términos de cómo hacer una campaña como esa, se necesita coraje, pero también es necesario escuchar a tus clientes, en su mayoría mujeres, para darte cuenta de por qué lo hacen", dijo Can Gumus sobre la campaña. "Es difícil hablar sobre procedimientos estéticos y hablar con millones de seguidores, eso requiere valentía, y es algo muy empoderante y eso es algo que, como empresa, nos gusta apoyar."

Desde que se lanzó la campaña, las 5 embajadoras han compartido sus experiencias sobre el amor propio y la medicina estética, con el fin de ayudar a las mujeres latinas a redescubrirse y encontrar la confianza que todas deberían tener, especialmente después de la pandemia, ya que cambió por completo el concepto de belleza.

"Algo que cambió, y ha estado sucediendo en los últimos diez años, pero realmente se aceleró durante la pandemia, es que la gente se preocupó por sí misma y se dio cuenta de que ellos mismos eran lo importante y entonces comenzaron a preocuparse por sí mismos y una cosa que sucedió fue que este concepto de autocuidado ha despegado tremendamente", señaló Gumus. "Y el cuidado personal es: ¿haces algo por otras personas o lo haces por ti mismo? ¿Haces procedimientos estéticos para verte mejor ante otras personas o los haces para estar contento con tu apariencia?".

Al final del día, el amor propio es un viaje continuo de aceptación y mejora, y la medicina estética puede ser una herramienta válida en ese viaje, siempre que se utilice de manera consciente y considerada.

¿Lo sabías?


Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de MILENIO DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
  • Andrea Bouchot
  • andrea.bouchot@milenio.com
  • Coordinadora de Chic Magazine digital. Egresada de la Licenciatura en Comunicación de la FES Acatlán. Vivo de cine, los libros, videojuegos y la buena comida.