El glaucoma es una enfermedad que aumenta la presión del ojo ocular y puede ocasionar la perdida de la visión. Esta enfermedad no solo afecta a los humanos, sino los perros también pueden sufrir este padecimiento.
Esta enfermedad es una de las más comunes en perros, pero lamentablemente cuando es detectada ya es demasiado tarde, por eso hoy te vamos a decir todo lo que tienes que saber del glaucoma canino.
Causas del glaucoma en los perros
Es una enfermedad degenerativa que afecta el nervio óptico y la retina, llegando a afectar la visión total o parcialmente. El padecimiento surge cuando hay un exceso de líquido intraocular en la estructura interna del ojo.
Por lo regular la enfermedad tiene su origen genético, pero también se puede relacionar con otros padecimientos o algún golpe que haya recibido en la cabeza, además el envejecimiento juega un factor importante, ya que entre más grande sea un perro tiene mayor probabilidad de desarrollar glaucoma.
¿Cómo evitar el glaucoma?
Aunque es una enfermedad que no tiene una cura precisa, sí se puede controlar si se detecta a tiempo, es por eso que te recomendamos que si tu perro tiene más de 5 años o tiene antecedentes familiares de glaucoma, acudas con un veterinario cada 6 meses para una revisión de rutina.
Las razas que son más propensas a desarrollar este padecimiento son: El Cocker, el Beagle, el Bichón Maltés, el Samoyedo y el Bulldog Francés.
Síntomas de glaucoma
Es muy difícil detectar el padecimiento en perros, ya que no hay una forma de comunicación directa, es por eso que debes estar alerta a cualquier cambio de comportamiento de tu amigo de cuatro patas, puesto que el síntoma que se presenta en etapas iniciales es la reducción de campo visual y esto hace que se comporte de una manera distinta a la habitual.
La manera más fácil en la que te puedes percatar que tu perro no ve bien es cuando el can está distraído en espacios abiertos y no logra centrar su atención en algo, esto se debe a que ve el mundo como si estuviera en un túnel.
Si tu amigo de cuatro patas presenta alguno de los siguientes síntomas, es una señal de alarma y tienes que acudir con el veterinario antes de que sea demasiado tarde:
• Ojos rojos
• Exceso de lagrimeo
• Le molesta la luz
• Un velo gris en los ojos
Tratamiento
Como ya se mencionó anteriormente, la detección temprana de la enfermedad es clave para que la calidad de vida de los perros se vea lo menos afectada posible y no pierdan su visión.
El veterinario le dará medicamentos para que se reduzca la producción del humor acuoso y de esta manera poder frenar el padecimiento, además en algunos casos se recetan analgésicos y antiinflamatorios para reducir las molestias causadas por el glaucoma.