Desde 1958, IKEA ha estado produciendo muebles para el hogar accesibles para Suecia y más allá. Hoy, la marca se ha vuelto tan exitosa, que ha podido expandirse a países como Estados Unidos, Canadá, el Reino Unido y, por fin, ¡a México! Son líderes en el mercado para dar soluciones para el hogar, pero lo que muchos no saben, si es que desconocen la marca, es que también son MUY reconocidos a nivel mundial por su comida.
Millones de personas alrededor del mundo van a IKEA para comer, y ahora que finalmente ha abierto su primera tienda en la Ciudad de México, es hora de probar y ver por cuenta propia todo lo que tiene que ofrecer además de muebles, diseño y objetos de decoración.
Pero lo verdaderamente maravilloso de esta experiencia es que no sólo ofrece una gran variedad de alimentos deliciosos, sino que, como si estuvieras en otro lugar del mundo, son buenos para el medio ambiente, a un precio accesible y, la mayoría, están inspirados en las tradiciones suecas.
Una gran parte del menú tiene la intención de demostrarle al mundo que es posible crear productos con calidad y función, sin dejar de lado la sostenibilidad y el sabor, ni alzar los precios. ¿No nos crees? Checa nuestras 4 razones por las que vale la pena lanzarte a IKEA y probar su restaurante.
Comida deliciosa y accesible
¿Se imaginan un platillo de albóndigas de proteína vegetal a 49 pesos? ¿Y un rico helado de postre a tan sólo 10? En el restaurante de IKEA no sólo hay opciones para veganos, y vegetarianos, sino que hay para todos los gustos y precios de México.
En cualquier fuente de sodas en la ciudad es casi imposible comer saludable, sustentable y con suficientes opciones a menos de 100 pesos, pero en esta tienda no sólo es posible, sino que también es delicioso.
Buena para el planeta y sostenible
Su hot dog vegano por ejemplo, tiene un impacto climático de siete veces menor que el de un hot dog clásico, ¡y cuesta solo 15 pesos!. Multiplica eso por 5 millones y comenzarás a ver un impacto real. Sus principales ingredientes son la col rizada, las lentejas, la quinoa, la cebolla y la proteína de trigo, todos ellos necesitan menos tierra y agua que la proteína animal para crecer.
Las albóndigas de proteína vegetal tienen el gran sabor y la textura de la albóndiga de carne de IKEA, pero solo el 4% de la huella de carbono. Eso significa que es igual de deliciosa, pero más inteligente.
Gran variedad
Podrás encontrar albóndigas veganas, plant-based y de carne, salmón, ceviche, sopa de tortilla, pays, ensaladas y sándwiches. Su gama es cada vez mayor en alternativas veganas y vegetarianas, pero también en todo tipo de alimentos.
Fuera de su Restaurante, en el área Bistro, podrás encontrar muchas otras opciones, como helados y dulces. Gran parte de su variedad está inspirada en las tradiciones suecas y hay cosas que no encontrarás en otro lugar.
Una experiencia diferente
A pesar de que se llama restaurante, en realidad IKEA ofrece una experiencia de cafetería. Tienes que formarte, agarrar tu bandeja (y tu carrito, si es necesario), agarrar la comida que gustes (o pedirla, dependiendo de lo que elijas) y pagar hasta el final.
Nadie tiene que ir a darte un menú, servirte, y no tienes que dejar propina. De igual manera, el refresco o agua que compres, tendrá refill las veces que quieras. Puede ser una nueva experiencia en familia, entre amigos o incluso entre pareja, y lo mejor de todo es que no gastarás casi nada en apreciar la excelente comida.
Disfrutar de una comida en una tienda así no es tan raro como lo imaginas, y cuando combinas el precio con la capacidad de tener comida realmente sostenible, es una gran elección.
Ikea llegó a México para asombrar y seguramente lo seguirá haciendo. Y en un país como el nuestro, las opciones accesibles, sostenibles y saludables son muy contadas. ¡No te lo puedes perder!