¿Te imaginas un arroz que no solo sea un acompañamiento, sino también una fuente de proteínas como la carne? Bueno, unos científicos están trabajando en eso. Y es que, han estado experimentando con granos de arroz para hacer un alimento súper nutritivo y amigable con el medio ambiente.
La idea es usar nanorecubrimientos y células de res para crear un arroz híbrido que sea parte de un sistema alimentario más sostenible. Eso quiere decir que, en algún momento, si es que todo sale bien, este "superarroz" podría reemplazar la carne bovina y estoy segura de que hará feliz a muchas personas. Conoce los detalles.
¿El arroz podría reemplazar a la carne?
La carne será deliciosa para muchos, pero desafortunadamente no es muy sustentable. Y es que, desde el emblemático debut de la hamburguesa de laboratorio en Londres en 2013, la industria alimentaria ha emprendido un viaje desafiante hacia la creación de alternativas sustentables a la carne convencional.
En este horizonte de innovación, los científicos de la Universidad de Yonsei, en Corea del Sur, han dado un paso significativo al presentar un producto revolucionario: el arroz carnoso, un alimento cargado de propiedades nutricionales que promete transformar la manera en que percibimos y consumimos proteínas.
El proceso para desarrollar este arroz híbrido fue meticuloso y visionario. Los granos de arroz fueron recubiertos con gelatina de pescado para facilitar la adhesión de las células de carne y grasa. Luego, estos granos fueron cultivados en placas de Petri durante un período de 11 días, permitiendo que las células se desarrollaran dentro de la estructura del arroz.
El resultado fue un hito científico: un arroz que alberga células de músculo bovino y grasa, prometiendo una fuente de proteínas y grasas similar a la carne convencional pero sin el impacto ambiental asociado a la ganadería intensiva.
Por si eso no fuera suficiente, el potencial nutricional de este arroz es impresionante. Comparado con el arroz convencional, este arroz carnoso contiene un 8% más de proteínas y un 7% más de grasas, lo que lo convierte en un recurso valioso para abordar problemas como la escasez alimentaria y la nutrición en entornos difíciles como las misiones militares o incluso futuras expediciones espaciales, según indican los investigadores en un artículo publicado en la revista Matter.
Sin embargo, Uno de los aspectos más destacados de esta innovación es su impacto ambiental reducido. La metodología de cultivo celular elimina la necesidad de criar ganado para obtener carne, lo que se traduce en una huella de carbono significativamente menor.
La investigadora Sohyeon Park destaca que la ganadería es una actividad altamente demandante de recursos como el agua y es una importante fuente de emisiones de gases de efecto invernadero. En comparación, la producción de arroz híbrido libera aproximadamente seis kilogramos de dióxido de carbono por cada 100 gramos de proteína, mientras que la carne de vacuno puede liberar hasta 50 kilogramos por la misma cantidad.
A pesar de los beneficios innegables de este avance, los científicos enfrentan desafíos significativos. Convencer a los consumidores de adoptar el arroz carnoso como una alternativa viable a la carne tradicional es crucial.
Si bien la carne cultivada en laboratorio se basa en procesos naturales de crecimiento celular, existe cierta resistencia debido a percepciones erróneas sobre su autenticidad o sabor.
Y es que, como con muchas alternativas vegetarianas, el sabor sigue siendo una de las principales barreras para la adopción masiva de estas alternativas. Aunque el arroz híbrido puede ofrecer una experiencia gastronómica satisfactoria, la complejidad sensorial de la carne de vacuno es difícil de replicar por completo.
¿Lo probarías?