Si has notado que los veranos cada vez son más cálidos... no estás mal. En efecto, los últimos veranos han sido más calientes de lo normal en gran parte del mundo y esto solo es el resultado del cambio climático, lo cual estaría empeorando año con año, y sin solución alguna.
Pero por si el verano y la canícula no fueran suficiente preocupación año contra año, hoy en día también nos hemos visto enormemente afectados por las ondas de calor en México. Y, frente a la cuarta ola, que estaría llegando el 1ro de julio, no solo hay que preocuparnos por nuestra salud (y temperatura), sino también por nuestra productividad laboral. ¿Y sabes por qué?
¿Qué es el estrés térmico?
El estrés por calor o 'estrés térmico', también conocido como hipertermia, se produce cuando el cuerpo se expone a un calor extremo y no puede enfriarse adecuadamente. Esto resulta en el rápido aumento de la temperatura corporal.
Normalmente, el sudor es la forma en que los humanos eliminan el calor corporal. Sin embargo, cuando la humedad es alta, lo que suele suceder cuando hace calor, el sudor no se evapora tan rápido como cuando las temperaturas son más frías. Esto evita que el cuerpo libere rápidamente el exceso de calor.
Aunque el estrés por calor puede afectar a cualquier persona, afecta más comúnmente a las personas que:
- Tienen 65 años de edad o más
- Individuos con sobrepeso
- Individuos que tienen problemas médicos existentes, como enfermedades cardíacas, diabetes o enfermedades respiratorias como asma.
- Individuos que están socialmente aislados.
Sin embargo, como es obvio, no solo las personas mayores son susceptibles al estrés por calor. Muchas personas jóvenes y sanas pueden ser víctimas si realizan actividades físicas extenuantes bajo altas temperaturas.
Beber demasiado alcohol cuando hace calor o tomar medicamentos que afectan la capacidad del cuerpo para regular su temperatura interna también son causas del estrés por calor.
Cómo afecta el estrés térmico a la productividad laboral
El estrés por calor es una preocupación para las personas en general. Y es que, cualquier persona expuesta al calor es vulnerable. El estrés por calor puede afectar a los trabajadores al aire libre, como los trabajadores de la construcción, los trabajadores de carreteras, los trabajadores de paisajismo, los trabajadores de líneas de servicios públicos e incluso las personas empleadas como salvavidas en piscinas.
Sin embargo, no solo los trabajadores al aire libre pueden verse afectados por temperaturas extremadamente altas, pues los empleados que trabajan en interiores en instalaciones donde las altas temperaturas son comunes, especialmente en verano, corren el mismo riesgo.
El estrés térmico puede afectar a los trabajadores en más formas que solo causar condiciones como golpe de calor o sarpullido por calor. Las altas temperaturas pueden provocar sudoración en las palmas de las manos, lo que puede ocasionar que un trabajador deje caer una herramienta desde una altura, o gafas de seguridad empañadas, lo que dificulta que los trabajadores vean correctamente. Las altas temperaturas a menudo pueden provocar mareos, lo que es un peligro para cualquier trabajador, pero especialmente para aquellos que trabajan en alturas.
No obstante, como seguramente lo sabes, el calor no pone de buen humor a la mayoría de las personas, y la salud mental es sumamente importante para el rendimiento laboral de cualquiera.
Cómo evitar el estrés térmico
Si los empleadores quieren asegurarse de que sus trabajadores estén protegidos contra enfermedades relacionadas con el estrés por calor, pueden tomar varias medidas importantes para lidiar con las condiciones climáticas cálidas.
Crear un plan de emergencia
Cree un plan de emergencia sobre el proceso a seguir si un trabajador ha mostrado signos de lesión o enfermedad relacionada con el calor y cómo comunicarse con los servicios médicos si son necesarios.
Aclimatizar a los trabajadores al clima caliente
Es fundamental ayudar a los trabajadores a aclimatarse al clima cálido si sus trabajos requieren que trabajen en estas condiciones. Los empleadores deberían tomar medidas para ayudar a sus trabajadores aumentando gradualmente la carga de trabajo día a día y permitiendo descansos más frecuentes, especialmente durante la primera semana de trabajo. Esto es vital para los trabajadores que nunca han tenido que trabajar en un clima cálido o que han estado fuera del trabajo durante varios días.
Agua de fácil acceso
Los trabajadores que deben hacer su trabajo en condiciones de clima cálido deben tener acceso a mucha agua potable segura. Además, los trabajadores deben recordar no tragar el agua, sino sorberla con frecuencia en pequeñas cantidades.
Distribuir la carga de trabajo
Cuando se requiere que los trabajadores trabajen en condiciones de calor, cuando sea posible, se les debe permitir distribuir uniformemente su carga de trabajo a lo largo de sus turnos. También se les debe permitir tomar descansos más frecuentes.
Evita trabajar en las horas de más calor del día
Cuando el clima es extremadamente caluroso, los empleadores deben tratar de organizar el horario de un trabajador para que trabajen durante los períodos más frescos del día o se les asignen tareas más livianas durante las horas más calurosas del día y ahorren el trabajo más extenuante para los períodos más frescos.
Alera a los signos de estrés térmico
Los empleadores deben enseñar a sus empleados cómo reconocer los signos de enfermedades relacionadas con el calor para que los trabajadores puedan vigilar a los demás en busca de síntomas de estrés por calor durante el clima cálido. También deben saber cómo administrar los primeros auxilios adecuados a cualquier persona que muestre signos de una enfermedad relacionada con el calor.
¿Lo sabías?