Se acerca la fecha para celebrar el orgullo de la comunidad LGBT, y aunque no se vivirá igual que en años anteriores, hay quienes se han sumado para mostrar su apoyo, y el arte ha sido una de las disciplinas que ha ayudado a difundir la empatía de una manera sutilmente creativa. Aquí te mostramos a cinco personajes que desde sus trincheras se han unido a esta causa.
La controvertida imagen de Zapata en tacones montado en un caballo le dio la vuelta al mundo en 2019. El artista chiapaneco, Fabián Cháirez, mostró su obra "La Revolución" como parte de la exposición "Emiliano. Zapata después de Zapata" en Bellas Artes, ante miles de críticas mencionó que su trabajó sacó a relucir la homofobia del país al grado de solicitar su retiro del recinto, y aunque logró permanecer tuvo que ser custodiada para evitar ser dañada.
Erin Nomi, la artista digital originaria de Monterrey, recientemente reveló su primera serie de imágenes que forman parte de una tesis visual que comprende el amor romántico y el amor propio en sus formas infinitas. La paleta de colores vibrantes es un reflejo de la libertad hacia las personas, involucrando al cien por ciento a esta comunidad.
El actor y pintor español, Jordi Molla, se ha sumado al apoyo de esta comunidad desde 2018 cuando creó su colección Gay Pride Art Show y fue expuesta en hall del Hotel RoomMate de la Plaza Pedro Zerolo en Madrid. Su obra a base de collage es descrita como divertida, representando cuerpos, sensualidad y mucho sentido del humor y de la ironía.
Life in Colour: Portraits of Queer Londonders es, como su nombre lo dice, una serie de retratos de personas de la comunidad LGBTTQ en Londres. Su autor, el animador digital británico, Leo Crane, incorpora la diversidad sexual al arte como un acto de amor a través de expresivos y enérgicos colores, reflejando un diálogo entre el artista con el espectador.
Melomaniaco creativo como él se describe, el ilustrador con presencia en México y España, Edu Rubio ha abierto su panorama para integrar obras en apoyo a esta comunidad que han sido presentadas en distintas partes del mundo tanto impresas como digitales. Su sentido de crítica social ha llegado lejos y es que no solo muestra colores brillantes y vivos, sino también emoción y energía que atrae a los espectadores para experimentar la empatía hacia estas personas.
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