Silvia Pinal es considerada la última diva de la Época de Oro del Cine Mexicano, debutó en 1949, cuando apenas tenía 17 años, y desde entonces ha trabajado incansablemente, lo que le ha permitido ser propietaria de una de las residencias más envidiadas de la Ciudad de México.
Entre algunas de las más grande producciones en las que participó se encuentran 'Un extraño en la escalera', 'Una dulce enemiga', 'Los cuervos están de luto', y la inolvidable 'Viridiana' que llegó a presentarse en el Festival de Cine de Cannes.
Los clásicos del cine mexicano le permitieron ganar en cinco ocasiones el premio Ariel y cuatro veces una estatuilla de las Diosas de Plata. Sin duda, una trayectoria bastante amplia que le ha permitido crear una inmensa fortuna, y aunque los cálculos de esta son desconocidos, lo que sí nos ha dejado ver en más de una ocasión es su lujosa casa.
Esta propiedad de la que hablamos se encuentra al sur de la Ciudad de México, en la distinguida colonia Pedregal, y no es una vivienda cualquiera, la actriz la diseñó a su gusto y encomendó al arquitecto Manuel Rosen Morrison materializar sus ideas.
Durante la década de los 50's esta zona era un terreno rocoso debido a la explosión del Volcán Xitle, que se encuentra en las faldas del Ajúsco, poco a poco comenzó a llamar la atención debido a que estaba alejada del centro y resultaba perfecto para edificar las residencias de las familias más adineradas.
En una entrevista para TVyNotas, la diva del cine mexicano reveló que fue su padre, Luis G. Pinal, quien le recomendó comprar el terreno tras obtener ingresos de la película 'Cabo de hornos' que tuvo su estreno en 1955.
Finalmente la casa se construyó en 1955, teniendo al mando al distinguido arquitecto Manuel Rosen Morrison, quien también estuvo a cargo de la alberca olímpica para las Olimpiadas de México, en 1968.
La casa la habita desde 1961, y sí, aún sigue siendo de su propiedad y aún mantiene muchos detalles intactos. Aunque en los últimos años la actriz ha vivido más de cerca con su hija Sylvia Pasquel, todavía visita la residencia con mucha frecuencia.
Y a pesar de que la matriarca de la dinastía Pinal disfruta de sus momentos de privacidad, ha ofrecido recorridos a diversos medios de comunicación para que conozcan la intimidad de su hogar, en los cuales se ha podido observar su lujosa decoración con candelabros y obras en los muros a cargo de reconocidos artistas, entre estos Diego Rivera.
También hemos podido observar que tiene una alberca y una enorme sala principal que es invadida por plantas para integrar la naturaleza y añadirle el toque de tranquilidad. Además tiene un hermoso jardín, varias recámaras, un bar, estancia, zona de servicios y terraza.
Por su hermosa arquitectura y decoración, la casa ha sido escenario de distintas grabaciones, entre estas la película 'María Isabel', de 1968, de manera que la residencia de Silvia Pinal siempre ha estado frente a nosotros.