El Museo del Niño Tuxtla Gutiérrez es un proyecto diseñado por la oficina de arquitectura mexicana C Cúbica Arquitectos. La iniciativa fue desarrollada por el Gobierno del Estado de Chiapas con la intención de ofrecer un espacio de aprendizaje y recreación regional en el cual todo el contenido se relacione con la cultura e identidad del estado chiapaneco.
Concebido como un proyecto social de gran impacto, se buscó generar una relación con la región, logrado a través del movimiento en las fachadas, reinterpretando la orografía Chiapaneca, específicamente el cañón del sumidero, plasmado a través de pliegues y formas que recuerdan el movimiento de este.
El complejo se desarrolla en dos niveles con una planta en forma de herradura, integrando al centro un parque abierto al público que funciona como espacio de encuentro. En la planta baja se ubica la plaza de acceso, un auditorio con capacidad para 105 personas, salas temporales, cafetería y áreas de servicio. En el segundo nivel se ubican las salas de exposición permanentes, dos talleres, terraza para eventos y las oficinas administrativas.
A pesar de contar con una estética compleja, el proyecto se caracteriza por una significante reducción de costos a través de diferentes recursos como la selección de materiales regionales, la aplicación de tecnologías ecológicas como la captación de agua pluvial para su tratamiento y reúso, la doble fachada de lámina metálica como protección de la incidencia solar y una adecuada ventilación natural, minimizando costos en consumo energético a lo largo de la operación del inmueble.
Otro dato particular de este proyecto es el compromiso por parte del Gobierno del Estado, pues cada una de las salas de exhibición fue adoptada por distintas secretarías con la responsabilidad de garantizar su mantenimiento y sus actividades.
El Museo del Niño es un proyecto integral que comparte valores y cultura regionales con la infancia chiapaneca, al mismo tiempo fomentando el respeto hacia la naturaleza, creando actividades y experiencias de valor.