Los primeros años de vida son cruciales para el desarrollo físico y cognitivo de los niños. Durante este período, la nutrición adecuada desempeña un papel fundamental, pero desafortunadamente no todos tienen la información correcta al respecto.
Según la experta en nutrición infantil, Verónica Copka, quien actualmente es la Coordinadora de Servicios de Marketing Médico en NIDO, los primeros 1000 días de vida, desde la concepción hasta los dos años, son clave para el crecimiento infantil. Así que sigue leyendo y entérate de todos los detalles.
La relevancia de los primeros 1000 Días
"Los primeros 1000 días son críticos porque es cuando se sientan las bases del desarrollo físico y cognitivo. Es una etapa en la que la alimentación debe ser sumamente cuidada para asegurar que los niños reciban los nutrientes necesarios para crecer de manera óptima", explica Copka.
En esta fase, la lactancia materna juega un papel fundamental, ya que proporciona una combinación única de componentes bioactivos que favorecen la salud digestiva e inmunológica de los bebés.
Sin embargo, como señala Copka, la lactancia materna no dura para siempre, y cuando esta llega a su fin, es esencial continuar brindando a los niños una alimentación adecuada que garantice su desarrollo.
"En México, lamentablemente, uno de cada cinco bebés de entre 6 y 23 meses no recibe las comidas diarias recomendadas, y solo la mitad consume los grupos de alimentos esenciales para su crecimiento", añade la experta. Aquí es donde la alimentación especializada, bajo la supervisión de un pediatra, se vuelve fundamental para garantizar una ingesta adecuada de nutrientes esenciales.
Con más de 80 años de historia en el ámbito de la nutrición infantil, NIDO ha sido un aliado de las familias en México y en el mundo. A lo largo de estas décadas, ha desarrollado un portafolio de productos que cubren las necesidades nutricionales de los niños desde los 12 meses hasta los 12 años de edad.
"Nuestro enfoque se basa en apoyar el desarrollo de los niños, asegurándonos de que cada etapa de su vida esté respaldada por una alimentación adecuada a sus necesidades", afirma Copka.
En los últimos años, la empresa ha hecho importantes avances, como la eliminación de azúcares añadidos en sus productos y el desarrollo de opciones sin lactosa para aquellos niños que requieren alternativas más fáciles de digerir. La visión de la marca es seguir proporcionando soluciones innovadoras y nutricionalmente balanceadas para apoyar el crecimiento y desarrollo físico y cognitivo de los niños.
Nutrición y desarrollo cognitivo: Un vínculo inquebrantable
El impacto de una buena alimentación en los primeros años de vida va más allá del crecimiento físico. La nutrición también juega un papel clave en el desarrollo cognitivo.
Según Copka, durante los primeros cinco años, el cerebro infantil requiere cinco veces más hierro y 1.5 veces más zinc que en la vida adulta, lo que subraya la importancia de una alimentación rica en estos nutrientes.
El DHA, las vitaminas y los probióticos son otros nutrientes esenciales que favorecen el desarrollo cerebral. "Una deficiencia en estos nutrientes puede tener efectos adversos a largo plazo. Por ejemplo, la falta de hierro puede afectar el desarrollo cognitivo y llevar a dificultades de aprendizaje y bajo rendimiento académico", alerta Copka.
Estos nutrientes son fundamentales para la formación de neurotransmisores y la oxigenación del cerebro, procesos esenciales para un desarrollo cognitivo óptimo.
De igual manera, la reducción del consumo de azúcar es una de las tendencias globales más importantes en la alimentación actual, y NIDO ha respondido a esta demanda de manera efectiva. "Nos hemos asegurado de que nuestras fórmulas no solo eliminen los azúcares añadidos, sino que mantengan un equilibrio nutricional óptimo para el crecimiento infantil", comenta Copka.
Esta adaptación ha sido posible gracias a la incorporación de probióticos, fibras prebióticas e inmunonutrientes en sus productos, que no solo apoyan el desarrollo físico de los niños, sino que también fortalecen su sistema inmunológico.
Además, la empresa ha puesto un gran énfasis en la sostenibilidad. "Hemos implementado empaques 100% reciclables y contamos con una fábrica de lácteos 'Cero Agua', donde el 100% del agua utilizada proviene de la leche fresca de vaca, lo que reduce significativamente el uso de agua subterránea", añade Copka. Esta estrategia sostenible no solo refleja el compromiso de la marca con la nutrición infantil, sino también con la protección del medio ambiente.
En un mundo donde los consumidores demandan cada vez más transparencia, las marcas tienen la responsabilidad de proporcionar información clara y precisa en el etiquetado de sus productos. Según Copka, "La transparencia es clave para generar confianza. Las marcas debemos apostar por etiquetas claras, donde se indiquen los ingredientes y los valores nutricionales de manera sencilla para que los padres puedan tomar decisiones acertadas".
Educación alimentaria: Un pilar fundamental
No se trata solo de ofrecer productos de calidad, sino también de educar a los padres sobre la importancia de una buena nutrición en el crecimiento de sus hijos. La marca ha desarrollado iniciativas como "Nestlé Baby and Me", una plataforma en la que los padres pueden acceder a información confiable sobre la nutrición infantil.
"Es crucial que los padres cuenten con información clara y basada en evidencia científica para que puedan tomar decisiones informadas sobre la alimentación de sus hijos", señala Copka.
La educación alimentaria también implica estar al tanto de las tendencias y necesidades cambiantes. Cada vez más padres buscan productos naturales y menos procesados, así como alternativas que promuevan prácticas sostenibles. "En NIDO estamos comprometidos no solo con ofrecer productos nutricionalmente adecuados, sino también con garantizar que estos sean elaborados de manera sostenible", explica Copka.