Con el fin de cambiar los hábitos alimenticios de niñas, niños y adolescentes, el gobierno mexicano, encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum, prepara un ambicioso plan denominado "Vida Saludable en las Escuelas", que marcará un cambio drástico en los recreos de las escuelas.
Este plan empezará a implementarse en marzo de 2025, por lo que este programa busca combatir problemas de salud como la obesidad y el sobrepeso, promoviendo un entorno escolar más saludable.
¿Qué cambio se hará en los recreos?
México enfrenta un grave problema de salud pública, que es el sobrepeso y la obesidad afectan a una parte importante de la población infantil y adolescente.
Según la Encuesta Nacional de Salud y Alimentación (ENSANUT), gran parte de la ingesta diaria de calorías proviene de productos ultraprocesados y bebidas azucaradas, como los refrescos.
En la conferencia del 21 de octubre, el titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Mario Delgado Carrillo, reconoció que aunque ya existían normas para prohibir alimentos con bajo valor nutricional en las escuelas, estas medidas no eran lo suficientemente estrictas ni efectivas.
Es por ello que el nuevo acuerdo busca cambiar esta realidad mediante reglas claras y aplicables en todas las escuelas del país.
¿Qué cambiará con el programa “Vida Saludable en las Escuelas"?
El programa abarca una serie de medidas que buscan impactar tanto en la oferta alimenticia como en la educación de estudiantes, padres y personal escolar, por lo que entre los puntos más destacados está la prohibición de alimentos chatarra, y esto cambiará a partir de marzo de 2025, ya que estará prohibida la venta de productos ultraprocesados dentro de las escuelas.
Esto incluye aquellos que cuentan con los tres sellos de advertencia establecidos por la Norma Oficial Mexicana 051.
Además, para reducir el consumo de bebidas azucaradas, las escuelas deberán contar con bebederos de agua potable, lo que fomenta una hidratación más saludable, sino que también busca eliminar la dependencia de refrescos y jugos industriales.
Los responsables de las cooperativas recibirán orientación y herramientas para transformar su oferta hacia alimentos más nutritivos. La SEP y la Secretaría de Salud proporcionarán materiales educativos y recetarios con opciones económicas y saludables.
No solo eso, sino que también, el plan también contempla campañas dirigidas a distintos públicos como a maestros, padres de familia, y los propios estudiantes con la idea de sensibilizar a la comunidad escolar sobre la importancia de estos cambios y ofrecer alternativas que sean atractivas y accesibles.
¿Qué productos desaparecerán de las escuelas?
Todo alimento o bebida con sellos de advertencia por exceso de calorías, azúcares, sodio o grasas trans será vetado de las cooperativas escolares.
Esto incluye refrescos y jugos industriales, papas fritas, pastelitos, galletas ultra procesadas, chocolates y dulces con alto contenido de azúcares.
Con estas restricciones, los estudiantes tendrán a su disposición una oferta alimenticia más balanceada y nutritiva, que incluirá opciones como frutas, verduras y snacks elaborados con ingredientes naturales.