Los tacos son uno de los platillos más relevantes en todo el mundo, y es que representan una parte muy importante de la cultura mexicana, pero muchos de ellos se comparten con crema, por lo que la Profeco ha revelado cuál es la peor marca de este acompañante que puede cambiar por completo el sabor de la comida; ¿quieres saber cuál es?
Desde hace muchos años, las tortillas han sido la base de los sabores más deliciosos de la cocina mexicana. Pero si hay algo que acompaña a estas delicias, es la crema para tacos. Este aderezo se ha convertido en un elemento imprescindible en la mesa de cualquier mexicano que se precie de disfrutar de la auténtica comida de su país.
¿Qué investigó la Profeco?
Consciente de la importancia de garantizar la calidad y seguridad alimentaria para los consumidores, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) hizo una exhaustiva investigación sobre diversas marcas de crema para tacos.
El objetivo de esta fue identificar aquellas que no cumplen con los estándares establecidos por la autoridad, asegurando así la salud y bienestar de quienes las consumen.
¿Cuáles son las marcas de crema que no cumplen con lo que prometen?
Después de hacer un riguroso análisis de 21 marcas de crema para tacos, los resultados no fueron positivos. Seis de estas marcas no lograron cumplir con los estándares de calidad exigidos por Profeco, lo que las convirtió en las peor calificadas en el estudio.
Estas marcas, lejos de satisfacer los requisitos mínimos de calidad y contenido, presentaron una serie de deficiencias preocupantes.
Entre las marcas señaladas por Profeco se encuentran algunas reconocidas en el mercado mexicano. Chilchota, por ejemplo, fue señalada por errores en la identificación en su etiquetado, lo que podría inducir a confusión al consumidor.
Por otro lado, Al-Día mostró deficiencias en el contenido de grasa y en los protocolos sanitarios de producción.
Las marcas Flor de Alfalfa y La Abuelita no cumplen con el contenido que se establece como mínimo de proteína para ser consideradas como crema, por lo que además miente en su empaque sobre el producto que es.
Camelia tampoco se salvó, pues esta carece del contenido mínimo de grasa que deben tener las cremas que se publicitan como ligeras, por lo que si buscas cuidar tu salud, no deberías consumirla.
Algo similar ocurre con la crema Del Rancho Rancherita, pues se exhibe como baja en grasa, pero no cumple con la norma de regulación de esta denominación.
Las deficiencias encontradas por Profeco no pueden pasarse por alto. Las marcas que no cumplieron con los estándares de calidad tienen la responsabilidad de realizar ajustes significativos en sus procesos de producción y etiquetado.
En caso de no ajustar lo que se les señaló, enfrentarán consecuencias más severas, como la retirada del mercado y posibles sanciones.
Así que ahora ya sabes qué marcas debes consumir.