Llevar un cachorro a casa es una experiencia emocionante y gratificante, pero también conlleva una gran responsabilidad. Antes de dar este paso importante, es crucial considerar diversos factores para asegurar el bienestar de tu nueva mascota y la armonía en el hogar.
Y es que, integrar a un nuevo miembro de la familia puede ser un momento emocionante y gratificante, pero también debe ser planificado y pensado estratégicamente y con mucho tiempo de anticipación. . Aquí te presentamos cinco cosas esenciales que debes saber antes de llevar a casa a tu nuevo amigo peludo.
1. Considera tu estilo de vida y tiempo disponible
"Es indispensable pensar en el tiempo", dijo Maribel Mosqueda Morales de la Asociación Pocas Pulgas. "Hay que pensar en si llevar un cachorro a casa es compatible con mis tiempos, mis horarios, mi estilo de vida. Sí soy una persona que salgo todo el día, debo de pensar que tengo que tener tiempo suficiente porque es un bebé para educarlo, para alimentarlo, para limpiarlo, ir a las consultas médicas. Como bebé, está en la primera etapa y tenemos que estar de la mano con el veterinario".
Tal vez no sea obvio, pero los cachorros requieren una atención constante, desde la alimentación hasta la educación y los cuidados médicos. Debes estar preparado para dedicar tiempo a educar, alimentar, limpiar y llevar al cachorro a consultas veterinarias regularmente. Si tienes un estilo de vida muy ocupado o pasas mucho tiempo fuera de casa, es importante considerar si puedes comprometerte con las necesidades de un cachorro.
2. Planifica tus salidas y tiempo Libre
Antes de llevar un cachorro a casa, debes planificar cómo manejarás tus salidas y tiempo libre. Los cachorros requieren supervisión y cuidado constante, lo que puede limitar tus opciones para viajar o salir los fines de semana.
Debes considerar si estás dispuesto a hacer los arreglos necesarios para cuidar al cachorro cuando estés fuera de casa, ya sea llevándolo contigo o dejándolo en una guardería de confianza.
"Si salgo todos los fines de semana, ¿en dónde lo voy a dejar? Esto implica un gasto extra porque o me lo llevo o ya cuando crezca, no me lo puedo llevar y lo tengo que dejar en una guardería con mi veterinario de confianza", explica Maribel.
3. Compromiso a largo plazo y espacio en el hogar
Adoptar un cachorro es un compromiso a largo plazo que puede durar más de una década. Además, debes estar preparado para brindarle un hogar seguro y amoroso durante toda su vida. "Es bien importante pensar que una adopción es una responsabilidad, es un compromiso a largo plazo mínimo de 10 años... Tengo que tener un espacio seguro en donde él se pueda quedar", menciona Maribel.
Antes de llevarlo a casa, asegúrate de tener un espacio adecuado y seguro donde el cachorro pueda vivir y jugar. Elimina cualquier peligro potencial, como cables sueltos o productos químicos, y proporciona juguetes apropiados para su edad y tamaño.
4. Educación y rutina
"Hay que asegurar tener un buen espacio y tener el tiempo para dedicarle a criarlo y enseñarle... Nosotros tenemos que darles esa rutina para que sea una vida más fácil para los que adoptamos y para el perrito", dijo Rocío Robles, rescatista y líder del refugio Adopta un amigo para siempre.
La educación y la rutina son fundamentales para el desarrollo saludable de un cachorro. Establece una rutina diaria para alimentarlo, sacarlo a pasear y jugar, y enseñarle órdenes básicas de obediencia.
También es importante que recuerdes premiar los comportamientos deseables con elogios y recompensas, en lugar de castigar los errores. La consistencia y la paciencia son clave para ayudar al cachorro a aprender y adaptarse a su nuevo hogar.
"Hay que entender que cuando llega un perrito, debe tener un tiempo de adaptación y en este tiempo pueden ser tímidos, pueden ir a la puerta y ladrar, pueden no tener toda esta parte hasta que van entendiendo que es un lugar seguro y van sacando su personalidad. Hay perros que son tranquilos, hay perros más juguetones, hay perros que ladran, entonces hay que tener esa paciencia y constancia", concluyó Rocío.
5. Atención veterinaria y adaptación
La atención veterinaria es esencial para garantizar la salud y el bienestar del cachorro. Antes de llevarlo a casa, programa una visita con el veterinario para un chequeo completo y discute el plan de vacunación y desparasitación. "La verdad es que esa etapa de entrada del cachorro al hogar es absolutamente fundamental y para mí el personaje que más es clave en este momento para los dueños es el veterinario", dijo Ernesto Ávila, Médico Veterinario Zootecnista.
La visita al médico veterinario va a definir TODOS los aspectos de su salud. "Hay que cuidar que no tengamos accidentes, que no haya tóxicos, que no haya cables, que puedan morder porque tenemos el tema de pacientes electrocutan o pacientes que consumen materiales inadecuados que pueden ser desde piedras, juguetes, etcétera", menciona Ernesto.
Asimismo, te podrá recomendar los juguetes que puede utilizar, la alimentación que debe tener y, por supuesto, darle seguimiento a sus vacunas. "Uno de los grandes mitos es que el cachorro sale hasta que se aplica la última vacuna y no es así", explicó el médico veterinario.
6. La alimentación de tu cachorro es el mejor comienzo
Como lo indicó Ernesto Ávila, la alimentación, además de que debe ser definida por el veterinario, es fundamental para el óptimo crecimiento y bienestar de un cachorro, para un óptimo crecimiento y bienestar para una vida larga y feliz. Fue por eso que Purina presentó Dog Chow Gran Comienzo, el único formulado con EXTRAlife, una mezcla especial de antioxidantes, vitaminas y minerales, que ayuda a maximizar la calidad de vida de tu cachorro.
“Un cachorro requiere una dieta con las cantidades adecuadas de calorías, proteínas, calcio y fosfatos para mantener su estilo de vida activo, por lo que hay que poner especial atención al alimento para que tu mascota mantenga su energía y vitalidad”, declaró Ernesto.
Al mismo tiempo, su sistema inmunológico y el desarrollo cognitivo están en pleno desarrollo, por lo que es importante que el alimento contenga ingredientes adicionales, como ácidos grasos omega-3, DHA y antioxidantes. Además, debe tener un tamaño y textura que se adapte a mandíbulas y dientes en crecimiento para facilitar la masticación y digestión, evitando posibles problemas de alimentación y promoviendo una buena salud bucal.
¿Lo sabías?